People Analytics es una herramienta para utilizar la información que se tiene de la planta de los colaboradores para la toma de decisiones, para facilitar el trabajo, para encontrar patrones que no son tan visibles. “People Analytics apunta más bien a cómo se puede usar la información para ayudar a la gente. Los resultados que se obtienen no son tanto de 'mejoré mi contratación' o 'empeoré mi score en las encuestas', sino que lo puedo usar para empezar a encontrar tendencias”, señala Federico Rosenhain, Director Académico del programa de People Analytics de la Universidad Torcuato di Tella. “Puedo empezar a usarlo para detectar si alguna área tiene más rotación que otra. Voy a entender dónde hay un punto de dolor en la organización. Puedo analizar resultados de encuestas, no solo desde lo cuantitativo, sino también desde lo cualitativo, y hacer analítica de los textos que ponen las personas en las encuestas, en los pulsos, en las evaluaciones. A partir de eso, puedo tomar decisiones que mejoran la calidad de vida de las personas dentro de las organizaciones. Los resultados pueden ser mejoras en la capacitación, bajas en la rotación, decisiones más soportadas por la gente. Por ejemplo, los sesgos suelen ser muy fuertes, y cuando se toman decisiones sesgadas, basadas en la intuición y no en datos, la adherencia a esas decisiones es baja”.

Las grandes empresas son hoy las que más aplican People Analytics, mientras que en las pymes no es una herramienta tan utilizada, aunque esto no necesariamente es por la barrera de entrada en cuanto a la inversión necesaria. “People Analytics dejó de ser un tabú. Las grandes empresas lo deberían estar aplicando a mayor escala, con más volumen de información, pero las pequeñas empresas también lo pueden aplicar; el tema es qué tipo de información recaban”, explica Rosenhain. “A las pymes les cuesta más salir de ese Excel de gestión, netamente operativo, para pasar a recopilar información más analítica. A veces, por ejemplo, son encuestas; a veces son los correos electrónicos que llegan al área de Recursos Humanos, para poder desglosar y extraer información de eso. Hoy por hoy la nube y las nuevas tecnologías abrieron la puerta de todo este juego y permiten que las pymes lo puedan usar, pero también deben tener la intención de hacerlo. A veces están tan ocupadas en el día a día, en la operación, que no tienen foco para ponerlo en People Analytics”. Hoy no es caro aplicar People Analytics y hay herramientas gratuitas para hacerlo.

Según Rosenhain, lo primero para encarar esta disciplina es entender un poco de datos, qué datos se necesitan, perder el miedo a operar con datos. También conocer algo de estadística, para empezar a entender qué vamos a hacer con los datos. Señala que hay que ver tendencias y tener capacidades de interpretación de los resultados que vayan dando las herramientas. “El tema es que históricamente se creyó que trabajar con datos era exclusivo de las áreas de sistemas, pero hoy se está demostrando que eso es un mito. Al sacarlo del área de sistemas, logramos dar a las personas las herramientas para que tomen las decisiones y hagan los análisis en el lugar en que tienen que hacerlo”, apunta.

Estas son algunas recomendaciones que propone Rosenhain:

Empezar a considerar capturar datos y registrar datos desde el momento cero. Cuanto más temprano en el tiempo arranquen este proceso, más natural va a ser la toma de decisiones basada en datos.

Hay que dar capacitación en estadística, en herramientas de business intelligence, en entender qué se puede hacer con los datos, cómo puedo entender, prever, visibilizar situaciones a través de los datos.

La gente más joven ya viene con una noción de que los datos son parte de su día a día; si la cultura es otra, hay que implementar un proceso para la toma de conciencia sobre por qué esta práctica de People Analytics es tan importante.