Actualidad
Marcos González Bibolini: “Le estamos dando a la compañía una impronta, más que inclusiva, de convivencia”
7/2/2022
Marcos González Bibolini es el Gerente de Recursos Humanos de Camuzzi. En esta entrevista con Dossier Talento & Empresa habla sobre el teletrabajo, las cuestiones de género, las necesidades de capacitación y el incremento de la productividad.
Talento & Empresa: ¿Están en un proceso de regreso a las oficinas?
Marcos González Bibolini: La distribución de gas fue siempre una tarea esencial, por lo cual gran parte de la organización tuvo que permanecer en la calle. Por supuesto, la salud y la protección de esos colaboradores se convirtieron en el eje central de nuestra gestión. El resto de las personas fueron a sus casas y nosotros ya veníamos con un programa de teletrabajo desde hacía dos años. Con lo cual, en la sede central que está en Buenos Aires, donde trabajan 270 personas, la cultura vinculada al teletrabajo ya había dado sus primeros pasos pre pandemia; además, tuvimos el apoyo fundamental de IT. Ese fue el principio. En la medida de que la cosa fue aflojando un poco, en sede central siempre optamos por seguir teletrabajando porque empezamos a medir la productividad y notamos, hacia fines del 2020, que no solo no se había visto afectada, sino que había aumentado. Lo cual era un dato no menor. Empezaron a aparecer problemas propios del teletrabajo, esta cuestión de que la gente sobretrabajaba, con lo cual lo fuimos regulando. Está el fantasma de esa pésima ley que no está vigente por suerte todavía, que me parece que atenta contra la posibilidad del teletrabajo al poner condiciones medio absurdas. Me parece que, con el convenio colectivo de trabajo y un acuerdo entre las partes, el teletrabajo es el presente y el futuro de gran parte de la fuerza laboral de la Argentina y el mundo, por supuesto supeditado a la actividad que hagas.
T&E: ¿Y cuál es la idea ahora?
MGB: En el 2021, en distintas jurisdicciones, fueron volviendo a la oficina las tareas administrativas, porque también tengamos en cuenta que, cuanto más chica es la ciudad, más fácil es la vuelta, y la idiosincrasia propia del lugar hace que el colaborador quiera ir a su lugar de trabajo. En la medida en que las ciudades son más grandes eso va cambiando y en localidades como Buenos Aires el teletrabajo ya ha pasado a ser un estilo de vida, más que una modalidad. Me parece que la pandemia nos cambió la forma de trabajar, pero también nos fue cambiando el ritmo de vida personal, con lo cual hoy nos encontramos con una situación en que la gente descubrió una forma de estar más conectado con su vida privada, mejorando su vida personal.
T&E: Hablabas antes de medir la productividad. ¿Cuáles son las métricas?
MGB: Nosotros trabajamos desde hace muchos años por objetivos, que son absolutamente medibles, de acuerdo con cada área, técnica, de operaciones, de captación de clientes, de morosidad, de recursos humanos. Sobre la base de esos objetivos, lo que vimos es que la gente los cumplía en tiempo y en forma de manera mucho más eficiente. Las reuniones eran más eficientes, la productividad aumentó, con lo cual muchos de los objetivos que nos habíamos planteado a principios de 2020, estaban cumplidos promediando el año. Yo creo que mucha gente utilizó el trabajo como refugio, en los primeros tiempos de la pandemia. Todas las evaluaciones de desempeño, que son las que hacen los líderes, han mejorado.
“Me parece que, con el convenio colectivo de trabajo y un acuerdo entre las partes, el teletrabajo es el presente y el futuro de gran parte de la fuerza laboral de la Argentina y el mundo”
“La productividad aumentó, con lo cual muchos de los objetivos que nos habíamos planteado a principios de 2020, estaban cumplidos promediando el año”
“Le estamos dando una impronta de una compañía, más que inclusiva, de convivencia. Nosotros estamos más por la convivencia que por la diversidad e inclusión. Nos parece que la convivencia es un estadío superior, y en eso estamos”
“Todo lo que está vinculado a la capacitación en materia de seguridad, le ponemos foco anual, y todos los operarios y casi todos los colaboradores de la compañía tienen una especie de certificación interna en materia de seguridad”
T&E: Dentro de la compañía, ¿cómo son las proporciones en cuestión de género?
MGB: Esta es una compañía que fue un desprendimiento de Gas del Estado, una actividad netamente masculinizada. Por supuesto, desde los últimos diez años hubo un incremento en la nómina de mujeres y, en los últimos cuatro años, hemos apretado el acelerador en la cuestión de la inclusión femenina dentro de la compañía. De hecho, la Directora General es una mujer, no porque es mujer sino porque es buenísima. Estamos en el proceso de hacer protocolos y políticas contra el acoso laboral. Le estamos dando una impronta de una compañía, más que inclusiva, de convivencia. Nosotros estamos más por la convivencia que por la diversidad e inclusión. Nos parece que la convivencia es un estadío superior, y en eso estamos. Aprovechamos la pandemia para hacer muchos talleres vinculados a la temática. Tenemos una herramienta muy fuerte de comunicación interna que nos ayudó mucho a difundir mensajes, no solo vinculados a la convivencia, sino también a todo lo relacionado con el cuidado personal, con la asistencia psicológica durante la pandemia, la asistencia de los chicos.
T&E:¿Cómo entienden y aplican este concepto de convivencia?
MGB: Nosotros partimos de la diversidad, posteriormente de la inclusión y, después lo pensamos como convivencia. Esto lo trabajamos con una organización que se llama PANAACEA, que trabaja con chicos con condiciones del espectro autista; ellos hablan de convivencia y lo tomamos un poco de ellos. Es un estadío superior, porque la inclusión sí, está bien, pero ¿quién soy yo para incluirte a vos? Vos estás incluida porque sí. La diversidad está muy bien, hay que hablar de diversidad, pero también existe desde siempre. Me parece que el concepto de convivencia engloba las dos categorías y hace que la gente pueda desarrollarse diversa e inclusivamente. Tenemos un slogan que es "Diversidad es que te inviten a la fiesta, Inclusión es que te saquen a bailar. Convivencia es que quien quiera bailar, baile". No es fácil, es de todos los días; está muy bien el relato, pero eso después lo tenés que bajar a una realidad con temas que la realidad te impone. Desde hace cuatro o cinco años le empezamos a dar una impronta más moderna a una compañía que, de por sí, es pesada, aburrida. La distribución de gas es lo único que podemos hacer. No somos una compañía de tecnología, de colores. Somos una compañía más gris. Con María Tettamanti, nuestra Directora General, y con Jaime Barba, que es el Presidente y Director Corporativo, vamos a colorearla un poco, desde adentro y desde afuera.
T&E: ¿Cuáles son, para ustedes, las capacidades valoradas y de qué manera implementan la capacitación?
MGB: Partiendo de la base de que somos una compañía de servicios públicos que distribuye gas, te imaginarás que la seguridad es nuestro primer punto a cuidar. Manejamos un fluido que puede llegar a ser peligroso, por lo cual, todo lo que está vinculado a la capacitación en materia de seguridad, le ponemos foco anual, y todos los operarios y casi todos los colaboradores de la compañía tienen una especie de certificación interna en materia de seguridad. Después, nos enfocamos, sobre todo en los últimos cuatro años en distintos tipos de capacitaciones en esta cuestión de modernizar un poco a la compañía internamente. Desde cursos, hicimos un convenio con la UADE muy interesante, un programa de desarrollo gerencial, que lo hicieron más de cien colaboradores de mediano y alto nivel, y ya vamos por la tercera edición. Después, hay cursos desde metodologías ágiles, liderazgo lateral, mucho coaching interno, de grupo; estamos muy encima del tema del trabajo en equipo y las habilidades que tenés que desarrollar para eso. Para darte un número que la pandemia también incrementó, el año pasado hicimos 20 mil horas de capacitación y este año vamos por eso de vuelta.