Adecco Argentina desarrolló un programa impulsado por la falta de talento y de recursos humanos en la provincia de Mendoza. A través de Adecco Escuela se generó trabajo formal registrado, lo que permitió formar perfiles especializados en un sector que lo estaba necesitando, como es el caso del agro. Desde la División Vitivinícola de la compañía, se detectó que esta problemática era un común denominador para los clientes del sector (bodegas en su mayoría) y se generó una alianza con algunos de ellos en una estratégica sinergia para intentar llegar a una solución. 

Adecco Escuela se compone de una capacitación técnica que, en el caso de las bodegas y fincas, consistió en un taller de poda para formar candidatos para la temporada, más una capacitación que se denomina ABC del trabajo formal, donde se abordan sus principales beneficios, como las ventajas de estar bancarizado y de tener prestaciones sociales, hasta cómo leer un recibo de sueldo. Esta iniciativa también permitió que las personas que participaron de la misma desarrollaran habilidades que les permitieran abrirse camino en el mercado laboral formal, con todos los beneficios que ello implica.