Empresas
La diversidad: una pieza clave para un mundo en plena transformación
5/10/2022
En esta columna, David García Escamilla, Head of People Americas en NTT DATA, analiza la importancia de incorporar más mujeres al sector tecnológico y el rol que juegan en esto las mismas empresas de tecnología y sus políticas de recursos humanos.
Quienes trabajamos en tecnología tenemos el extraño privilegio de formar parte del sector que está colaborando a cambiar el mundo a través de la digitalización. Esta transformación es profunda e impacta en el conjunto de la sociedad. En este contexto se hace imprescindible que las empresas que lideran este proceso, así como el resto, cuenten con equipos ampliamente diversos, que permitan aportar formas de mirar el mundo, experiencias y perspectivas diferentes, para satisfacer las necesidades y las demandas de un público que es plural por naturaleza.
Puntualmente, en términos de equidad de género, en NTT DATA estamos convencidos de que es necesario multiplicar los esfuerzos no solo para incorporar más mujeres en el universo tecnológico, sino para propiciar un quiebre cultural: fomentar la curiosidad desde la infancia por la tecnología y trabajar activamente en las fases tempranas de educación y formación para que las niñas decidan, en un futuro, dedicarse profesionalmente a las carreras conocidas como STEM (siglas en inglés por ciencia, tecnología, ingeniería y matemática) para así reducir de manera estratégica y sustentable la brecha que sigue existiendo en nuestro mercado.
En paralelo, esto debe acompañarse con programas concretos que faciliten la incorporación de mujeres al mercado laboral, incluso cuando no posean una formación específica de base en tecnología, y que luego ofrezcan propuestas equitativas, libres de prejuicios y de barreras ficticias, para que estén en igualdad de oportunidades para escalar y ocupar puestos directivos en cualquier ámbito de la organización. Es fundamental trabajar en los aspectos culturales, en especial para dejar de lado muchos sesgos inconscientes que históricamente impidieron el ascenso y el crecimiento profesional de las mujeres. Se debe apuntar precisamente a lo contrario. En este sentido, en NTT DATA se destaca la iniciativa de mentoring ejecutivo WomenTogether, que se lanzó recientemente en todos los países de Latinoamérica.
Hacia el concepto de “uniqueness”
Pero esto es apenas el principio: cada persona es única y tiene sus propias capacidades. Las empresas en general y los líderes en particular tienen el desafío de construir grupos que, por un lado sean inclusivos, en los que los propósitos individuales de cada uno de sus miembros estén alineados con el propósito corporativo, y que por el otro sean equitativos, dando a cada persona todas las oportunidades posibles en función de su perfil, sus capacidades, sus fortalezas y sus intereses para que pueda desarrollarse, tanto en el plano profesional como en el personal, al máximo de su potencial. Nos gusta llamar a este concepto en NTT DATA “uniqueness”.
En una época de máxima competencia por el mejor talento, en especial en el sector de las nuevas tecnologías y las habilidades digitales, este enfoque tiene además un beneficio para la organización: una mayor fidelización del capital humano y un mayor compromiso por parte de los colaboradores.
La diversidad y la inclusión no puede ser una estrategia de marketing ni una moda pasajera: es fundamental que toda la organización esté convencida de su importancia y que la sostenga como un valor y un principio de liderazgo que rija el día a día de cada uno de los colaboradores que trabajan en ella.
La digitalización está contribuyendo a generar una sociedad más justa, plural y sostenible. Un impacto positivo que debe llegar a todas y cada una de las personas. Y esa es, precisamente, la base de la diversidad y la inclusión.