JAE3 es una red apolítica y no religiosa formada por emprendedores, empresarios y ejecutivos, que tiene el propósito de abogar por una sociedad libre de antisemitismo a través de los valores de Empatía, Inclusión y Respeto.

El año pasado, tras los terribles sucesos del 7 de octubre, se esperaba una reacción de sensibilidad y apoyo hacia la comunidad judía. Sin embargo, ocurrió lo contrario. Valeria Abadi SVP Brand Global de Globant, una de las fundadoras expresó que, "fue como una cosa muy rara, pero habilitó a que el antisemitismo se pueda expresar más libremente". Ante esta reacción que detectaron como discriminación, pensaron en la posibilidad de abordar este tema de manera orgánica y estructurada en empresas y organizaciones. "Armamos una asociación de profesionales para llevar esta temática a las empresas y luchar contra el antisemitismo. En un primer momento la pensamos como una asociación de judíos, pero la grata sorpresa es que ya no lo es. Hoy decimos que es una asociación abierta y no religiosa y no política, y dejamos muy en claro que es una red abierta, porque mucha gente no judía también se sintió interpelada y se quiso sumar con el mismo objetivo. Hoy somos más de 600 miembros a nivel, a nivel país”, comenta Abadi.

“Queremos darle visibilidad a la situación por la que estamos atravesando”, agrega Mariano Filarent Head of Agency South Cone de Meta, también uno de los miembros fundadores. “Cuando ocurrió lo del 7 de octubre, seguramente cada uno de nosotros fue a su empresa y no pasó nada. Y para nosotros eso es un dolor enorme. A seis meses, muchos creerán que la situación ya no amerita que le prestemos tanta atención. Nosotros creemos que sí. Como comunidad, sentimos el sufrimiento de cosas que no nos están pasando a nosotros personalmente, como si fuera nuestro. Más allá de tener o no situaciones de discriminación para nosotros, me siento microagredido cuando nadie nunca me pregunta cómo me siento”. Valeria Abadi también apuntó que la falta de condena a las violaciones cometidas el 7 de octubre es una agresión muy fuerte para la comunidad judía. "En un mundo en el que estamos todo el tiempo hablando de los derechos de las mujeres, los derechos de los niños, que ONU y UNICEF no hayan expresado su total repudio después del 7 de octubre, que hayan tardado meses y meses en tener una comunicación muy lavada, eso es realmente un acto de discriminación absoluta", afirmó.

Por otra parte, Filarent explicó cómo se introduce el tema del antisemitismo en la agenda de diversidad de las empresas. "La idea es generar espacios de diálogo¸ se armaron diversas mesas de diálogo con cámaras, con algunas empresas. Se hicieron visitas al Museo del Holocausto, seguidas de una de un debate donde se aborda la temática. Mostramos nuestros argumentos respecto de la situación y por qué nos sentimos atacados y angustiados a la vez. También desde algunos lugares nos han convocado para ver si podíamos llevar nuestro punto de vista, en el que abogamos por la tolerancia, por la democracia, por un sistema democrático que contenga a los intereses nuestros y los de los demás”.

En relación con los resultados de las reuniones y debates organizados, Valeria Abadi comentó que, aunque muchas empresas afirmaron no haber vivido situaciones de antisemitismo, se fueron con la sensación de que es un tema que no se habían cuestionado. "Dentro de las charlas, les preguntamos '¿Te acercaste a las personas de identidad judía después del 7 de octubre para saber cómo están? ¿Sabés si alguno sintió en algún contexto alguna situación de discriminación o de incomodidad?' Y la verdad es que la mayoría no lo hizo", señaló.

Desde la asociación JAE3, se brinda apoyo a las organizaciones que deseen incorporar el tema del antisemitismo en sus agendas de diversidad. Ofrecen un modelo de charlas, visitas al Museo del Holocausto y un conjunto de profesionales para un trabajo más exhaustivo. Además, invitan a quienes quieran formar parte de esta red a sumarse. Esta iniciativa no solo busca combatir el antisemitismo, sino también promover un ambiente empresarial inclusivo y respetuoso, donde todas las identidades sean valoradas y protegidas.